El factor determinante de 2025 es la vuelta de Donald J. Trump, empresario y político americanista, al que «alguien» le robó las anteriores elecciones, buscó arruinarle sus negocios, meterle en la cárcel, difamarle con una fuerte campaña mediática, más la cancelación digital de él y de sus aliados y simpatizantes, al que casi lo matan, más otros atentados que fueron frustrados y ahora amenazan de muerte a sus nominados. Los que no pudieron evitar la cárcel fueron su ideólogo y estratega Steve Bannon y su asesor de Economía y comercio internacional Peter Navarro. Esos sería solo algunos ejemplos de lo encarnizada que es la lucha por el poder en el Hegemón, uno que está en pleno cambio de Ciclo Generacional en el que se enterrará el Progresismo, un proceso que llevará una generación y que sin duda cambiará la Pax Americana y, por tanto, el Orden Mundial.
La referencia a un nuevo orden mundial nos remite inmediatamente al «New World Order» (NWO) del Progresismo, propio del Foro Económico Mundial, tan querido por su ex (¿?) empleada, la maléfica Teresa Ribera, y conocido por aquello de «no tendrás nada y será feliz» (¿Anti-nutriéndonos comiendo insectos?) Pero hay otro NWO, el que hace referencia al «Orden del Nuevo Mundo» (esto los europeos no lo entienden), con sus reminiscencias a Colón y la Nueva Jerusalén, Tomás Moro y Utopía, Francis Bacon y «The New Atlantis«, William Penn y su «Santo Experimento«, o Toqueville y el mismo Washington, quien en su discurso de despedida (pieza maestra) recomendaba no aliarse con los europeos por no ser nada fiables y por los valores nefarios de sus élites. La Pax Americana actual, que muere por disfuncional, tiene mucho de un complejo de inferioridad de los americanos respecto de los europeos, pero resulta que Donald Trump, que cumple sus promesas, y su «dream team» no tienen ningún complejo, como el ignorado y discreto pero implacable verdugo comercial Robert Lighthizer.
Con este marco en mente intentaremos prever cómo será 2025 utilizando las últimas previsiones económicas del Fondo Monetario Internacional, que presentamos casi telegráficamente, pues usaremos estadísticas de 42 países presentados por agrupaciones económicas, pensando especialmente en los exportadores, que son quienes nos sacaron del pozo maldito de la fantasía inmobiliaria y serán claves para resolver la psicopatía sanchista.
Las grandes potencias.
Su previsión general (siguiente gráfica), a la espera de ver cómo el ajuste fiscal estadounidense afecta a la economía y a sus responsabilidades globales, es buena, incluso para Rusia, gracias a activar su complejo militar industrial y a las restricciones de importación por las sanciones, aunque padezcan una inflación grave.
Hay que decir que ante la posibilidad cierta de un eje Berlín-Moscú, como promueven algunos loquitos en España, o un dominio ruso del continente, no habrá paz en Europa, algo en lo que están de acuerdo al menos 14 países relevantes de Europa, de ahí la necesidad de la OTAN, en la que España debe defender sus intereses en un Mundo que es, por cierto, cada vez más salvaje. Para evitar dicho dominio ruso se ha establecido un credo geopolítico muy concreto donde Polonia y Ucrania son claves para el Orden Mundial, nuevo o viejo. La otra amenaza a la paz en Europa sería un ejército de la OTAN al este del Niéper, luego debería haber arreglo, ¿no?
Tanto Rusia, India y China, como los países de la UE, son grandes beneficiarios de la actual e insostenible Pax Americana, hasta que se convierten en amenazas para esa «arquitectura» y cada uno (salvo India) intenta darle lecciones (BRICS, España de ZP, etc.) al Hegemón; veremos cómo les va con el «America First». Por impulso de Trump, plagiado luego por los demócratas, a China le aplican la terapia japonesa, que llevará una generación, y ya comienza a normalizar su crecimiento, a Rusia lo visto, mientras que con una mucho más inteligente India, todo son amores; allí adoran a Trump y mantiene su alto crecimiento secular.
La substitución de China.
Para esto se utilizará especialmente a la periferia de la misma (países todos aterrados con ella, algunos de antaño), además de la producción interna estadounidense, junto con la de cualquier aliado inteligente (no es nuestro caso desde Carrero Blanco) Las prácticas comerciales chinas son tan aberrantes que hasta la élite nefaria de la UE se ha dado cuenta (una década tarde). Los primeros beneficiarios de la Nueva Pax Americana son los más próximos a China, destacando, de mejor a peor, Vietnam, Corea, Taiwán y hasta la economía zombi japonesa, con EE.UU. siempre viéndose en el espejo británico.
Choque de civilizaciones.
Mientras Occidente, con EE.UU. al cabeza, se pega con Rusia y China, e India observa, una amenaza existencial para todos espera su oportunidad, cosa que ocurrirá en esta generación, cuando los europeos originarios se reducirán hasta un veinte por ciento en muchos países. Todo depende de lo inteligente, o no, del aislamiento que cada Establishment haya fijado con ellos. Tienen crecimiento alto, como lo es su inestabilidad política, financiera y jurídica, pero lo suficiente como para que la codicia (o la corrupción) ciegue a los mandatarios; cada caso lo hemos analizado (Marruecos, Argelia, etc.) y está publicado, que no veremos por cuestiones de espacio, solo decir que en el presente cambio de Ciclo Generacional todos van directo al islamismo, que empezó Turquía enterrando el kemalismo y trayendo el neo-otomanismo, como advertimos en su momento.
El núcleo del conflicto es su credo común (sí, hay variantes), un constructo gnóstico anti cristiano, anti judío y enemigo a muerte de Roma (hoy Occidente), pero que es más duro, si cabe, con otros credos, teniendo un componente bélico muy grave, como lo demostró el oficiante, cimitarra en mano, de la «conversión» de Santa Sofía en mezquita. En Occidente, pero sobre todo en España, reina la ignorancia sobre el particular, a pesar de las evidencias cotidianas, y se quiere creer una narrativa que es falsa, demorándose los correctivos necesarios a un experimento progresista nada santo.
Hispanoamérica.
El conflicto anterior no es nuevo y, tal vez, gracias a él, ocurrió el «Descubrimiento». En la región están ocurriendo varios fenómenos de sumo interés. El primero, que todos están atravesando su crisis del Ciclo Generacional (Colombia, Chile, Venezuela, México ahora con su AMLA, etc.). El segundo, que cada vez es más común encontrar hispanoamericanos que son conscientes de que la voladura del Imperio Español fue un error, que aquel cambio de Ciclo Generacional se hizo mal, habiendo un sentimiento que recuerda a los previos de la Reunificación de Italia, con hispanos que no quieren que les llamen latinos e incluso los hay que están horrorizados con la demografía española, pues ven que perderán su raíz originaria. Por supuesto que tienen/tenemos un pasaporte al futuro, que diría Don Marcelo Gullo.
Como España, toda Hispanoamérica está gobernada por partitocracias cuyo instrumento para la anulación de la soberanía nacional, para someterlos y, por ejemplo, imponer la Leyenda Negra, es el sistema electoral proporcional de listas de partidos estatales, un mecanismo pensado para el control de las colonias británicas y países de interés, con él hacen lo que proponía Mackinder, esto es: dejar de lado los ideales democráticos y colocar «organizadores», o sea, cipayos, traidores, que es lo que padecemos. Marco Rubio igual arregla otras cosas, pero esta no, pues es un asunto interno de patriotas y naciones adultas. ¿Lo somos?
Lo anterior nos lleva a Argentina, donde Milei se supone cambiará el sistema electoral por uno representativo de los ciudadanos, de la nación, no de los partidos, y con poderes independientes; si no lo hace, será otro falso-liberal. Y sí, va consiguiendo grandes cosas, bajar la prima de riesgo, equilibrio fiscal, bajar la inflación y alto crecimiento, nada que no se consiguiera en ajustes anteriores, como pueden ver en la gráfica. Si vino solo a ajustar y a sermonear, para que en otros países hermanos hagan lo mismo y luego volver a las andadas «organizadas», Hispanoamérica habrá perdido una generación y seguirá en el mismo pozo de estiércol. Aquí podría fácilmente quedar bien y evitarme problemas, pero por responsabilidad no evitaré la pregunta: ¿Es Milei un patriota o es otro «organizador» como los que ahora nos gobiernan? Lo sabremos pronto. Mientras, el resto de países seguirán con un crecimiento por debajo de su potencial.
Lo pequeño es hermoso.
Hasta que les ponen «organizadores» woke y adiós país. La mayoría de los países de esta agrupación (ver siguiente gráfica) son excelentes mercados de exportación, clasificando de los primeros por su buena legislación, bajísima corrupción y honestidad ejemplar. Lamentablemente, son casi todos negro-legendarios, algo que se ha agravado recientemente, dándose el caso de la Universidad de Upsala, donde no solo han cerrado el Foro de Estudios Latinoamericanos que presidía el hispanista Leonardo Rossiello, sino que incluso han eliminado su página web, borrando más de una década de trabajo; debe ser que, ante los cambios demográficos, la potencia cultural hispana y la progredumbre imperante les ha despertado miedos ancestrales hoy absurdos.
Todos estos países dependen en gran medida del Hegemón para su soberanía y de todos ellos destaca Israel, que sale creciendo como el campeón que es tras la recesión por la guerra en cuatro frentes desde el 7-O. De hecho, para toda Europa Occidental se plantean dos opciones existenciales: el suicidio libanés o la supervivencia israelí. Por supuesto, el Progresismo trabaja para la primera opción. ¿Pero de dónde sale esta casta traidora que gobierna Europa?
Europa vs wokestán.
Nuestro liderazgo surge de un proceso muy complejo que, muy resumidamente, comenzó a principios del XIX, cuando una miríada de grupúsculos, víctimas muchos de ellos del Establishment político y religioso de entonces, decide buscar la iluminación en Oriente siempre que no fuera cristiana, claro, lo que les lleva a su gran enemigo: el gnosticismo. Estos grupos de fanáticos vinieron bien a los Estados para subvertir a los vecinos y está más que estudiada su influencia en el nazismo, el comunismo, y el progresismo; hoy, convertidos en Establishment y gobernando en los Estados y organismos internacionales actuales, expanden desde ellos una especie de antinomismo gnóstico pro islámico que les va muy bien para enriquecerse, mientras imponen sus psicopatías, expolian a las naciones y siempre dispuestos a felicitar cualquier cosa menos la Navidad, porque la odian.
Ese podría decirse que es el credo de quienes gobiernan las principales economías de la UE y al Reino Unido, naciones todas en crisis y a las que esos pirómanos están dejando zombis; son nuestros principales clientes, pero no olvidemos que Francia, Alemania e Italia presionaron para suprimir la enseñanza obligatoria del español en Brasil. La excepción es Polonia (y Europa de Este), a quien también la maltratan nuestros supuestos aliados en la UE, pues cambió de orden con la caída del al URSS y todavía disfruta de la fase de despegue de su Ciclo Generacional, fase en la que entraríamos cuando cambiemos el orden socialdemócrata actual.
España, por su retraso cíclico, aún disfruta las mieles de la recuperación, pero entre las grandes economías de Europa, el panorama es de crecimiento raquítico y más inestabilidad política. Por tanto, nuestra ilusión no puede estar ahí, sino en los enormes frutos de cambiar el orden actual que destruye nuestras naciones. Pongámonos a ello.